“Explicamos los principios tradicionales del Método Pilates”

“Sería un grave error pensar que sólo hacer ejercicio es suficiente para lograr el completo bienestar físico. La persona que cuide su alimentación y hábitos de sueño y que se ejercite correctamente estará tomando la mejor medicina preventiva” Joseph Pilates

 

En entradas anteriores ya os hemos hablado de la historia del Método Pilates; de sus inicios, personajes relevantes, diferentes etapas… Hoy queremos hablar sobre los principios tradicionales que desarrolló Joseph y que han ido evolucionando y mejorando para adaptarlos a nuestros tiempos. Aunque para los instructores estos principios son fáciles de comprender y llevar a cabo en la práctica, para muchos de nuestros alumnos son difíciles de sintetizar y comprender la esencia de cada uno de ellos.

 

La evolución médica, biomecánica, nutricional, anatómica… nos ha llevado a ampliar, complementar y evolucionar estos 6 principios tradicionales. También, nos ayuda a comprender la esencia del Método y sobre todo dimensionar a Joseph por su capacidad de desarrollar un Método y que conserve toda su vigencia hasta nuestros días.

 

¿Cuáles son los principios del Método Pilates y cuál es su significado?

 

  • Concentración

El principio de concentración se refiere al grado de atención hacia nuestros movimientos y el ejercicio global que estamos desarrollando. Enfocar lo que estamos haciendo y hacia dónde nos dirigimos, sentir el movimiento. Cuanto más concentrados estemos más coordinación y eficacia de movimientos.

 

  • Control

Es la unión de nuestra propia conciencia corporal junto a las indicaciones externas y personalizadas de nuestro monitor.

El control depende de tu propia concentración y de las indicaciones que te esté dando el monitor de Pilates. A más concentración más calidad de movimientos, si a esto le sumamos un correcto feedback de nuestro monitor y adaptamos nuestro movimiento a sus indicaciones conseguiremos un completo control del ejercicio.

 

  • Fluidez

El movimiento en Pilates es ininterrumpido, el movimiento fluye. La fluidez permite realizar el movimiento de forma suave, uniforme, evitando los movimientos bruscos. La fluidez es la coordinación completa del movimiento con la máquina y la adaptación de nuestra propia respiración.

Principio seguramente influenciado por la relación de Joseph Pilates con la danza. La fluidez es como una coreografía perfecta en la que un movimiento “tira” del otro para conseguir un movimiento global perfecto.

 

  • Precisión

En Pilates la técnica de los movimientos es vital para lograr los objetivos específicos que se están buscando. Esta búsqueda de la perfección es quizás lo que más la diferencia de otras disciplinas.

La precisión es realizar la técnica del ejercicio con movimientos precisos y limpios para asegurar la calidad del movimiento.

 

  • Centralización

Core o Powerhouse en términos de Pilates. Localizado en la parte inferior del tronco desde el diafragma hasta el suelo pélvico. Una región que comprende algunos músculos que dan soporte entre las áreas de la cintura escapular y pélvica.

El principal objetivo de la centralización es fortalecer el centro para estabilizar el tronco y obtener importantes beneficios.

 

  • Respiración

La respiración siempre debe de estar coordinada con el movimiento. Los movimientos respiratorios de inspiración y expiración deben de estar sincronizados dentro del ejercicio para oxigenar correctamente los órganos y tejidos.

 

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