“Sería un grave error pensar que sólo hacer ejercicio es suficiente para lograr el completo bienestar físico. La persona que cuide su alimentación y hábitos de sueño y que se ejercite correctamente estará tomando la mejor medicina preventiva.” Joseph H. Pilates 

El embarazo es sin duda uno de los momentos más bellos e importantes en la vida de una mujer, una época repleta de cambios tanto físicos como hormonales que representan un reto para su salud. Todos estos cambios pueden derivar en dolores y molestias, para los cuales el Método Pilates puede ser un gran aliado.

El embarazo lo podemos diferenciar en diferentes etapas o periodos; en cada uno de estos periodos se producen diferentes cambios en el cuerpo, por lo que, se deberían de adaptar los diferentes ejercicios de Pilates por un Monitor de Pilates altamente cualificado.

¿Qué cambios se experimentan en los diferentes periodos de gestación?

Primer trimestre

En la primera etapa del embarazo se sufren cambios hormonales muy relevantes que suelen derivar en una sería de síntomas que destacamos:

• Sensación de fatiga
• Nauseas y vómitos principalmente durante la mañana
• Acidez estomacal
• Antojo o rechazo a diferentes alimentos 
• Estreñimiento

Hay mujeres que pueden padecer este tipo de sintomatología y otras que no experimentan molestias durante esta etapa.

Segundo trimestre

Por regla general, esta puede ser la etapa más llevadera del embarazo, el cuerpo se ha habituado al cambio hormonal y el abdomen empieza a crecer. El bebé continua desarrollándose, se forman órganos internos, y la madre es capaz de notar algunos movimientos del bebé en su tripa (como rascarse, succionar…).

En esta etapa se produce un gran cambio a nivel físico. La madre experimenta un gran aumento en su barriga que desplaza el centro de gravedad de su cuerpo y suele derivar en dolores de espalda.

Tercer trimestre

En la última etapa del embarazo, el bebé crece aceleradamente, ejerciendo presión sobre la vejiga y el estómago. Esto también genera un aumento en el peso corporal de la gestante que suele derivar en dolores en el hueso público, la zona lumbar o la ingle. Del mismo modo, pueden aparecer dificultades respiratorias por la localización del bebé cerca de las costillas.

Recomendaciones generales para la práctica del Método Pilates en el embarazo

El Método Pilates puede ser muy beneficioso para las futuras Mamás ya que las ayuda a mantener una buena postura, ser conscientes de los cambios en su cuerpo y aliviar los dolores que sufren durante el embarazo. Pero, es imprescindible que estas clases sean impartidas por Monitores de Pilates cualificados que diseñen Clases de Pilates destinadas a fortalecer y tonificar su musculatura, aumentar su flexibilidad y mejorar su respiración y coordinación.

Por regla general, podíamos decir que durante la gestación se puede realizar Pilates durante dos o tres veces semanales, siempre siguiendo las recomendaciones de su médico.

La práctica del Pilates está contraindicada si se sufre: problemas de hipertensión o cardiacos, abortos habituales, diabetes materna, enfermedades pulmonares… y otras enfermedades o complicaciones, por lo que, siempre se debe de practicar Pilates una vez se disponga de la autorización de su médico.

¿Qué beneficios me puede aportar el Método Pilates?

• El aumento de peso y los cambios sufridos a nivel físico suelen derivar en diferentes dolencias. El Método Pilates mejora la postura y te hace más consciente de los cambios que se están produciendo en el cuerpo.
• Fortalece los músculos, consiguiendo tonificar el cinturón abdominal y los músculos más profundos como el transverso y el psoas, reduciendo la posibilidad de sufrir dolores lumbares.
• Fortalece los músculos pélvicos, facilitando el control de la zona pélvica y el parto.
• Mejora la flexibilidad y coordinación.
• Mejora la respiración, consiguiendo una respiración más profunda y controlada que facilitará las contracciones.
• Mejora su autoestima al desarrollar una actividad junto a otras gestantes que le permitirán desarrollar una actitud segura y positiva.