“Mujer, ¡conecta tu suelo pélvico!”

“Con Pilates pueden tonificarse y flexibilizarse todas las estructuras de la pelvis mediante estiramientos pasivos o trabajo de tonificación-contracción, a los que acompaña una respiración controlada.”

Siempre que se haga en un centro de Pilates certificado y con profesores cualificados, Pilates es el mejor método de entrenamiento y te asegura la realización de los ejercicios sin riesgo de lesión.

La clave del éxito del método Pilates es que los ejercicios se realizan de forma totalmente personalizada y adaptada a la condición física, posibles patologías, necesidades y objetivos de cada persona. Las máquinas están pensadas para asistir al alumno y poder aislar el movimiento para que sea seguro. De ahí que algunas veces, recomendamos que las clases sean individuales o semi-privadas.

El beneficio que nos proporciona este método es que en cada ejercicio se trabaja simultáneamente el fortalecimiento y el estiramiento muscular, lo que se traduce en un ejercicio que requiere precisión y mucho control.

  • ¿Qué es y cómo funciona el suelo pélvico?

Para muchas mujeres el suelo pélvico es un gran desconocido. Sin embargo, esta musculatura es muy importante para nuestra calidad de vida porque si está debilitada afectará a nuestro bienestar físico y psíquico.

Uno de los principios de Pilates es trabajar la musculatura profunda, el transverso del abdomen, para así dar estabilidad a la columna y a la pelvis.  Éste junto con el oblicuo interno juega un papel importante a su vez en la musculatura del periné. Los músculos que forman el suelo pélvico trabajan en conjunto con la musculatura profunda del abdomen y el oblicuo interno. Este trabajo en equipo permite realizar muchas acciones de la vida cotidiana, además, de ayudar a la estabilidad de la columna y la pelvis, produce el cierre de los esfínteres y eleva los órganos (vagina, uretra y recto).

El suelo pélvico nos permite cerrar la pelvis ósea, garantizar la estabilidad de la región lumbo-pélvica junto con el transverso del abdomen y los músculos cortos espinales, sostiene las vísceras pélvicas, permite la micción, defecación, y es vital a la hora de mantener relaciones sexuales.

En resumen, un suelo pélvico debilitado puede provocar incontinencia urinaria, prolapsos, disfunciones sexuales o dolor lumbar.

  • ¿Sabes como conectar tu suelo pélvico?

En las clases de Pilates conectaras tu suelo pélvico en cualquiera de los ejercicios.

Trabajar el suelo pélvico es vital para lograr una correcta alineación del cuerpo y una estabilidad lumbo-pélvica. Los ejercicios de Pilates empiezan desde el centro, reclutando el suelo pélvico, el transverso del abdomen, que asociado a una correcta respiración costal, nos permite activar los músculos estabilizadores de la columna vertebral.

Cerca de un 33% de las mujeres, en mayor o menor grado, sufren una disfunción de su suelo pélvico, esto afecta considerablemente a su calidad de vida.

Con Pilates podemos corregir sus patologías, desde la incontinencia, al prolapso genital, disfunciones orgásmicas, vaginismo y hemorroides.

El suelo pélvico es principalmente tejido muscular, como tal, debemos trabajarlo tanto para tonificarlo como para relajarlo, juega un papel principal a la hora del embarazo y del parto, el bebe deberá pasar por ahí llegado el momento, por lo tanto, su trabajo es muy beneficioso para las madres, ya que pueden evitar el sufrimiento del niño, y acelerar su posterior recuperación postparto.

 

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