“Yoga o Pilates, ¡tú decides!”
El método Pilates y el Yoga a menudo son confundidos por personas que quieren empezar a practicar uno de los dos y no sabe bien cuáles son sus diferencias.
Si tú estás en esa tesitura, piensa que esta decisión puede ser muy importante porque lo que decidas será parte de tu vida.
Para tomar la decisión más acertada, solo tienes que decidirte en función de los resultados que estés buscando.
¿Qué estas buscando?, ¿Qué quieres conseguir?
- Espiritualidad
El Yoga desde sus inicios busca una espiritualidad de exploración. La meditación se convierte en una práctica muy relevante a la hora de practicar Yoga. En el método Pilates la alineación mente-cuerpo es uno de sus principios básicos, aunque no tiene un enfoque tan espiritual como el Yoga.
- Tonificación muscular
Tanto Yoga como Pilates son dos prácticas excelentes para fortificar y tonificar todos nuestros músculos. La práctica de Pilates en aparatos nos permitirá conseguir una notable tonificación muscular, flexibilidad, mejorar el sistema sanguíneo y linfático, corregir la postura y estabilizar la figura.
Las asanas o posturas de yoga, trabajan para estirar y fortalecer el cuerpo. “Estas poses de estiramiento y fortalecimiento pueden tonificar los músculos para lograr un cuerpo largo y esbelto” (Tara Stiles).
- Rehabilitación y prevención de lesiones
Está demostrado que el método Pilates contribuye a la hora de rehabilitar muchos tipos de lesiones. Desde la escoliosis, lesiones de hombro, de cadera, de rodilla, de columna vertebral… son muchos los estudios que refrendan la práctica del Pilates como un método de prevención y rehabilitación de todo tipo de lesiones.
El Yoga está más enfocado a la rehabilitación mental y emocional que nos puede proporcionar una práctica mucho más espiritual y profunda.
¿Cuáles son sus principales diferencias?
- Orígenes
El método Pilates surgió gracias a J . H. Pilates que desde pequeño fue un niño enfermizo, lo que le llevó a estudiar el cuerpo humano y la manera de fortalecerlo mediante el ejercicio. Su propósito era descubrir una metodología para mejorar el estado de salud de personas con dolencias mediante el ejercicio. En 1923 se trasladó a Estados Unidos y montó en Manhattan, junto a su esposa Clara, un estudio para enseñar su método.
El yoga (del sánscrito ioga) es una tradicional disciplina física y mental que se originó en la India. La palabra está asociada a prácticas de meditación en el hinduismo, budismo y jainismo. Hasta los años 60 esta practica se popularizó en occidente de la mano de Swami Sivananda y Maharishi Mahest.
- Enfoque de ambas prácticas
Yoga y Pilates tienen bastantes similitudes, ambos tienen movimientos similares para mejorar la fuerza, la flexibilidad y la conexión cuerpo-mente. Sin embargo, el Yoga es una práctica mucho más espiritual enfocada en la mente, el Pilates en cambio está mucho más enfocado a mejorar la postura, tonificar el cuerpo, rehabilitar y prevenir lesiones y tonificar todos los grupos musculares.
- La respiración
Hay pequeñas diferencias en la utilización que hacen estas dos prácticas en la respiración.
La respiración en Pilates es uno de sus principios clave ya que ayuda a controlar los movimientos, oxigenar los músculos, estabilizar la columna y movilizar las extremidades, de este modo, conseguimos relajar la musculatura y a ser consciente de las tensiones acumuladas en el cuerpo.
En el Yoga, la respiración tiene un mayor fin relajante. Durante las rutinas de yoga, es importante concentrarse continuamente en la manera en que se utiliza la respiración. Ser consciente de la respiración y tener una conciencia corporal permite relajar los músculos que puedan estar generando estrés y de este modo ayudarnos a tener un mayor control corporal y mental.