“Pilates, el complemento ideal para otros deportes.”
Pilates es el complemento perfecto para cualquier deporte. Uno de los grandes beneficios de la practica de Pilates es el de mantener un cuerpo y una mente saludable, sin más; pero Pilates es mucho más y se puede usar para mejorar el rendimiento deportivo, fortalecer la musculatura para prevenir lesiones y acelerar la recuperación si éstas se producen…
Además, a la hora de complementar la práctica del deporte que se este realizando, Pilates realzará la importancia de una buena respiración a la hora de realizar los ejercicios y acciones deportivas; esto aumentará el consumo de oxígeno, y por lo tanto, la resistencia, en términos generales y mejorará la condición física general.
El método Pilates también nos complementará al mejorar otro tipo de capacidades, como la coordinación y la concentración de los deportistas que lo realicen, especialmente en situaciones de estrés a la hora de competir.
El Pilates tiene la ventaja de que trabajará al mismo tiempo ejercicios de fuerza muscular y flexibilidad, pudiendo adaptarlos para mejorar nuestra resistencia, según la intensidad del ejercicio o el número de repeticiones, logrando trabajar algo que los deportistas suelen olvidar por completo y repercutirá en el rendimiento del mismo, estoy hablando de la flexibilidad, algo que a veces por tiempo, otras por pereza se suele olvidar en los programas de entrenamiento.
Existen deportes en los cuales se desarrollan ciertos grupos musculares, sobre entrenándolos y dejando de lado los otros grupos musculares, lo cual provoca un desequilibrio muscular, en los músculos que estamos incidiendo continuamente aumente la probabilidad de sufrir una lesión. El Pilates es un complemento único para el desarrollo muscular equilibrado.
Los ejercicios de Pilates desarrollan los grupos musculares desde dentro hacia fuera, lo cual quiere decir que comienzas mejorando la fuerza desde el centro del cuerpo hasta las extremidades, logrando mejorar nuestra estabilidad y logrando un equilibro muscular.
La recuperación es otro factor importante que debemos tener en cuenta en nuestros deportistas, sobre todo en etapas competitivas. Cualquier entrenamiento intensivo o competición provoca un agotamiento, y después de este esfuerzo debemos recuperar nuestro organismo, “recargándonos de nuevo”. El Pilates es un ejercicio aeróbico de baja intensidad que se opone a la gravedad, y relaja la tensión de las articulaciones, lo cual hará que nos recuperemos antes por que se mejorará la circulación sanguínea, limpiando todos los desechos que nuestro organismo ha generado con la competición. Se puede decir que el rendimiento deportivo está muy afectado por dos factores ligados con la recuperación, los cuales son la rigidez de los músculos acortados, y la capacidad del cuerpo para eliminar el lactato muscular producido por la fatiga.
Estos son algunos ejemplos de los beneficios de la práctica combinada de Pilates y otros deportes;
Running, beneficios de practicar Pilates;
- Mejora la estabilidad pélvica, evitando sobrecargas innecesarias durante la carrera.
- Se alargan y fortalecen las piernas.
- Desarrollo de la coordinación y el equilibrio.
Ciclismo, beneficios de practicar Pilates;
- Estira la musculatura de las piernas y de la zona pectoral, normalmente muy cerrada y acortada
- Potencia la musculatura del tren superior y del core (powerhouse), que no se trabaja tanto en el entrenamiento ciclista.
- Previene la hipercifosis dorsal y las molestias articulares y musculares que la propia postura estática sobre la bici producen.
Natación, beneficios de practicar Pilates;
- El profundo trabajo en el powerhouse que se realiza en Pilates, ayudará al nadador a mejorar su técnica en el agua.
- Garantiza la flexibilidad y movilidad de todo el cuerpo aguantando la resistencia del agua.
- Lo bueno de Pilates, es que podrás seguir entrenando si surge algún imprevisto que te impida ir a nadar, como una alergia o un
Padel y Tenis, beneficios de practicar Pilates;
- Equilibra el desarrollo muscular en ambos lados del cuerpo.
- Mejora el equilibrio y la coordinación entre la parte superior e inferior del cuerpo, esencial para ajustar la velocidad con que mueves la raqueta y el desplazamiento del cuerpo.
- Gracias a la respiración, se desarrolla una alta capacidad de concentración durante todo el partido.